MELBOURNE.- Abierto de Australia , minutos después del primer triunfo de Juan Martín del Potro.
-En un momento del partido te veías frustrado. ¿Fue por algo especial de tu juego o por las condiciones climáticas?-preguntó el periodista en el campo de juego.
-No, simplemente el clima. Espero que esté mejor el jueves, aunque sea un poco-respondió, en forma de deseo, la Torre de Tandil.
-Creo que tengo malas noticias -arremetió el notero-, va a estar cerca de los 40 grados.
-No. No. -se desahogó Del Potro-. No me digas eso que recién termino de jugar.
Este risueño diálogo fue un resumen de lo que sufrió Delpo en su debut en el primer Grand Slam del año. El encuentro ante el estadounidense Rhyne Williams, número 129 del mundo, le costó más de los esperado: cuatro sets y tres horas de juego. Por eso, además de mostrarse molesto por las condiciones climáticas, el tandilense ensayó una autocrítica.
"No esperaba este tipo de partido. No sabía mucho cómo juega pero sirvió muy bien y su golpe de derecha es bueno", admitió Del Potro. "Empecé muy lento, se me hizo difícil pero luego pegué unos buenos golpes de derecha", agregó.
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